Me invitaron a Depeche Mode, y no fuí. Me
invitaron a Metallica, y no fuí. Me invitaron a Paul McCartney, y tampoco
acepté. -- Hasta unas horas antes, yo ya había decidido NO ir al concierto de
los Rolling Stones. Pero luego de haber posteado una broma acerca de una
entrada realizada a punta de lápiz y buen humor, alguien apareció en mi cuenta
de Facebook a ofrecerme un ticket en una zona irrechazable. Esta es la crónica
de una gentileza, la corta crónica acerca del descomunal poder de los (buenos) gestos.
En
estos días de despidos y subidas de Dollar, mi vida está un poco complicada y
se me hacía muy difícil poder adquirir una entrada para el gran concierto de los Rolling Stones. Con lo que costaba un ticket, podría defenderme
por un par de meses para las tormentas que se avecinan. Así que dije: "No
voy... No hay que ser tan frivoleros".
En eso, estando convencido de no
ir, entré al Muro de mi amigo Martín Roldan, y vi una "entrada" para
el concierto de los Rolling que algún bromista había dibujado sólo por joder.
Lo jalé para mi Muro y puse un texto en el mismo cause de broma. Tuvo muchas
respuestas festivas y hartos "likes"... De pronto, comenzó a
escribirme gente por el Inbox, ofreciéndome entradas para que no me quede sin
ver a los Stones. Una chica me dijo: "mi novio ha comprado dos, y a mí no
me gusta mucho... Yo podría NO ir y tú podrías ir con mi novio"... Me sonó
un poco raro, pero le dije que vayan juntos, que desde ya "tu presencia es
muy importante para él, y él va a querer que vayas"... Y ahí quedó. Luego
había un muchacho, que en su buena onda me estaba ofreciendo una entrada para
Tribuna, pues le sobraba un ticket... Yo dije que eso no era muy justo, que
debería ir con alguna otra persona. Y el amigo fue con su sobrino. Lo cual -le
dije- me alegró muchísimo, pues esos detalles quedan para siempre.
Pero
luego apareció otro contacto, alguien con quien no suelo alternar mucho en el
Facebook (que me dijo no diga su nombre) y me ofreció enviar dinero para que
pueda comprar una entrada. Yo le dije que NO, que eran muy caras. Él me
insistió. Y yo le seguí diciendo que NO. En el colmo de la buena onda, me dijo
que él mismo compraría la entrada por Internet y que yo la podría recoger de
cualquier Teleticket... Mi novia me dijo: "acepta, debes aprender a saber
decirle SI a los obsequios y buenos gestos de quienes de verdad te
quieren"... Con eso me cagó. Y le dije al amigo que YA, que aceptaba su
tremenda gentileza. A los pocos minutos fui a un Teleticket, recogí mi entrada,
me junté con un par de compinches y nos fuimos al Estadio.
El concierto fue
fantástico. Los Rolling Stones estaban más Rolling y más Stones que nunca. Vi al ex-Faces Ron Wood y me
encontré con mucha gente que siguió cubriéndome de buenas vibras y ondas muy
positivas, abrazos emocionados, saludos cordiales, etc. Fue una noche increíblemente
buena. Al terminar, caminé como flotando, embelesado por todo lo que me había pasado.
Sólo
queda decirle al amigo (y a todos los demás que tan gentilmente transmitieron
tan lindas vibras), MUCHAS GRACIAS, gracias por tan formidables gestos, gestos que
hacen que este planeta siga albergando tan lindas y nobles esperanzas. Gracias.
(Daniel F)