Ahora que las aguas
están calmándose, y lo del Premio Nobel para Bob Dylan ya está siendo asimilado hasta por quienes más se oponían, puedo al fin publicar esto.
Cuando uno es fan de
la música y de alguno de sus cultores, y de pronto te inicias en ese campo, lo
que vas a hacer es mostrar tu agradecimiento a todas aquellas figuras y obras
que tanto te entusiasmaron. Le pones el nombre de tu banda como algún disco adorado,
en las letras los recuerdas de cuando en cuando, etc. Hasta puedes recordarlos
musicalmente, haciendo versiones de alguna canción o incluyendo guiños
sonoros de tu ídolo, en alguna canción
tuya. De esta manera, uno intenta no sólo compartir un gusto, sino también difundir
lo que tanto amamos.
En la segunda mitad
de la década de los 60, comenzó a circular una versión pirata de un libro de Bob
Dylan, llamado TARÁNTULA, libro en prosa poética que recién saldría legalmente
en 1971. Pues bien, por estos lares, pero en los 90’s, yo saqué un pasquín (un
fanzín, una revista artesanal) y busqué un nombre. Y qué mejor nombre que aquel
venenoso libro que circuló ilegalmente y que fue desdeñado –cuando no- por los
críticos. Le puse “Tarántula”. Salieron varios números y la onda era de entrevistas a grupos locales, difundir sus trabajos, contar anécdotas... pero sin caer en lo intelectual o en lo horripilozamente mesiánico. Todo esto, claro, sin perder el buen humor.
Pude haberle puesto “Escorpión”, “Libélula” o “El Piojo Loco”… pero preferí "TARÁNTULA", para que recuerden el libro de Dylan, y porque éste circuló muy buena parte de sus días, de manera escondida, soterrada, totalmente underground... Quién diría que,
muchos años después, ante la sorpresa de joyas y joyones, su ponzoñoso autor iba a ganar
el Premio Nobel de Literatura… aunque ud. refunfuñe, mi amigo.
(Daniel F)
Yo tenía varios números de TARÁNTULA. No sé que habrá pasado con ellos. Pero recuerdo los artículos y las fotos. Deberías hacer una revista, F.
ResponderEliminarYa nadie lee revistas... Se me acumularían en mi patio.
EliminarMuy cierto. Ahora no se lee ni un cuento de media pag.
EliminarRecuerdo ese fanzine, destacaba por su información del rock local y sobre todo su delicioso humor negro...
ResponderEliminarjajjaa Si, pz
Eliminar¡Huevooón, la cagada! Me falta un número para completar la colección de Tarántula. Ya casi. Chévere, abuelo. (y)
ResponderEliminarbien, Rolly.
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